Preparándose para la vida con un bebé: Instaló el asiento del carro y ensambló la cuna. Ya lavó todos los mamelucos y pañaleros, y se abasteció de pañales. ¿Y ahora qué? ¿Qué más puede hacer a fin de prepararse para la llegada de su bebé?

Limite a los visitantes en los primeros días y pregunte quién puede ayudarla con una carga de ropa o los platos en el fregadero.

Coma bien, beba suficiente agua y haga ejercicio a diario; esto ayudará a minimizar los efectos de la falta de sueño. Pero lo más importante, tenga en cuenta que todos los bebés se despiertan con frecuencia y que es un mecanismo de protección que perderán cuando su nivel de desarrollo esté listo.

Considere los primeros tres meses con un bebé recién nacido como el cuarto trimestre. A su bebé le gustará un entorno similar al del útero: poca iluminación, cálido, cerca suyo y alimentación a demanda. Si satisface estas necesidades, su bebé se sentirá seguro.

Cuidar a su bebé de esta manera también la ayudará a aprender a criarlo. Aprenderá todas las claves sutiles de su bebé, sus gustos y lo que le desagrada, y mucho más. Tenga en cuenta que también necesitará tiempo para recuperarse. Por lo tanto, deje que el cuarto trimestre sea su tiempo para recuperarse. Reduzca sus expectativas y olvídese de la lista de tareas. Disfrute de su bebé y sea paciente con usted mientras aprende a ser madre.